ALBERT PUJOLS: RETIRO, NO DESDE LA BANCA

PUJOLS

RINCÓN BEISBOLERO

Por: José Carlos Campos

 

10 de Mayo de 2021- Días que sirven para recordar a Babe Ruth cuando dijo que “cuando sientes ir cuesta arriba cuando corres a primera base, ya va siendo hora de que pienses en el retiro”. Algo así nos surgió al enterarnos de que Albert Pujols pactó con los Ángeles de Los Ángeles que fuera dejado en libertad, en algo que puede entenderse como un eventual anuncia del retiro de este gran pelotero.

 

No fue, así lo entendemos, un despido deshonroso por parte de los Ángels, no fue una  forma injusta de deshacerse de un pelotero muy seguramente integrante dentro de algunos años del Salón de la Fama. Nos quedamos con la idea de que fue el propio pelotero de quien salió la idea y salir así del contrato firmado hace 10 años por 240 millones de dólares.

 

Los números logrados por Pujols le dan para entrar a la primera (y hasta por unanimidad) a Cooperstown. Quinto lugar en la historia en cuadrangulares conectados (667), 3253 hits de por vida, 2112 carreras producidas y un .298 de promedio de por vida, números como para domingos, días festivos y ocasiones muy especiales.

 

Obvio, el pelotero quería estar en el terreno de juego, no terminar siendo pieza de museo en el dogout, sabiendo que su equipo ya tiene quien juegue la primera base (Jared Walsh) o actúe como Designado (Shohei Otani). Muy en su derecho de pedir innings de trabajo pero siendo realistas, no había cupo para Pujols, no lo hay.

 

Se entiende así el arreglo al que llegaron Pujols y los Angels, el hacerle caso al “déjenme ir” para en todo caso, buscar algún equipo en donde pueda llegar jugando al final de su gloriosa carrera. Desde el terreno al retiro, no desde la banca.

 

VOLADAS- Ya metidos en gastos y con el envión que se carga la LMB este año, no faltaron los que especularon que bien podría Pujols aventarse la del estribo jugando en el verano mexicano. Aún más, hay quienes hasta se animaron a pedirle a dos que tres dueños de clubes que hicieran el intento luego de que, conocido es, este es el año en que varios “ex” de MLB por aquí andarán.

 

El júbilo, por no decir envalentonamiento, no sabe por ahora de límites, no hay forma de detener la percepción de que este año, por razones que van desde lo económico hasta el usar a la LMB como un “mientras” a otras chances, están llegando peloteros que llegaron a forjar un buen cartel en Grandes Ligas, otros no tanto.

 

Más acá, casi agazapado,el análisis del porqué esos “ex” ya no lo fueron, hurgar en los detalles del por qué ya no siguieron siendo y es que a final de cuentas, que vistan de gala y de signos de admiración a una liga que hare rato no adquiere tonos de brillo lo amerita. Venga pues la rimbonbancia.

 

Lo que creemos es que Albert Pujols tratará de irse de este deporte por la puerta de enfrente, que a este 2021 le queda cuerda. Lo hará en su nivel, en el nivel en donde hizo una carrera superlativa que lo llevará directo a Coopertown.

 

Lo de venir a la LMB es más que nada, un buen deseo por no llamarlo “volada”.

 

RUINAS- El desarrollo de la campaña de las Grandes Ligas de este año es oportunidad para tomarle el hilo a un deporte que a ojos visto, ya es otro. Digámoslo con datos: 27 de los 30 equipos tienen más ponches que hits conectados, señal de que hoy los bateadores buscan en cada turno hacer méritos para con jonrones al calce, más ceros a la derecha aparezcan en sus cheques.

 

Para los lanzadores, sumar ponches es lo de hoy, es lo que hace sustentable su presencia en los equipos, lanzar la recta a más de 100 millas, ponchar a muchos, lo demás no importa, eso hace crecer su salario.

 

Y mientras tanto, el espectáculo se reduce a ver esos dos sucesos como lo neurálgico, que lo demás (citando al clásico) bien se puede ir al carajo.

Share