RINCÓN BEISBOLERO
Por: José Carlos Campos
26 de Octubre de 2021- Pues llegó el momento especial, el que se espera durante casi seis meses y que polariza en mucho al mundillo beisbolero. Se armó la Serie Mundial 2021, duelo inédito en estas instancias el que celebrarán los Astros de Houston y los Bravos de Atlanta, Los primero, casi esperado, la tribu como una muy grata sorpresa.
En la víspera, los momios se estará moviendo en favor de los texanos dejando que los arriesgan su lana verán en los Bravos el “underdog” con el que pueden sacar buenas ganancias.
Que si se trata de repasar el pasado reciente, el “cómo” llegan ambas escuadras, al menos para nosotros hay un mayor mérito en la forma en que los Bravos lograron su boleto, pasando en la serie de campeonato sobre los Dodgers de Los Ángeles, el campeón reinante. y que a la postre se convirtió en la gran decepción.
Por supuesto que lo de los Astros tuvo su chiste, prácticamente llegando desde atrás para arrebatarle a los Medias Rojas de Boston el pase a la serie por el cetro de las Grandes Ligas, jugando buena pelota y aprovechando cabalmente el que a los patirrojos se les acabó el gas en la recta final.
Que si lo generalmente aceptado aplica, esto en cuanto a que el pitcheo es lo que manda, especialmente en series cortas, nos quedamos con los Bravos gracias a su mejor rotación. Además, una ofensiva que no se queda corta ante la de los Bravos, así sea que en nombres no lo parezca.
Que inicien entonces las acciones, que inicie lo mejor (o que deba serlo) del año.
DODGERS- Queda en la mesa el tema de los Dodgers que finalmente, al lamerse las heridas deben empezar por reconocer que lo suyo fue un fracaso mayúsculo, descalabro que les costó alrededor de 252 millones de dólares.
Y no faltan los que creen que si hay una autocrítica en serio, debe revalorarse la permanencia de Daver Roberts en el puesto de manager o bien, si la gente de arriba debe renunciar a su pertenencia a la secta sabermétrica, que tal parece que ahí fue donde se incubó el huevo se la serpiente.
Porque no parece más razón que el apego a la soberbiometría para que Roberts se haya encargado de desmadrar tan aparatosamente su staff de pitcheo, retomando la idea (hecha estrategia fallida) de abrir con relevistas, acudiendo a los “openers” que no abrieron su un refresco. Teniendo esa rotación de pitcheo abridor, tal parece que una PC (y quienes la operan) le dictaron al manager que lo ideal era no usar a lo ya probado.
Chueco que derecho, los Bravos encontraron el resquicio para ganar a la buena. A los Campeones no se les dio repetir lauros y a Roberts tal parece que le gustó cambiar palmas por pitos.
POSICIÓN- Que hoy en día, al menos en las Mayores, se observe un beisbol que parece muy distante al que veíamos no hace mucho, en donde las estrategias son sacadas de un costal muy diferente, en donde se renuncia al toque de bola “porque regalas un out” y mejor es que el pelotero búsqueda ceros en el cheque con jonrones y los pitchers negocien contratos mostrando número de ponches dan pie para pensar que este juego se ha desnaturalizado.
No sabemos qué tan cierto puede ser a las nuevas generaciones de aficionados les atraiga esta nueva forma de jugar el beisbol y si es que acaso, aprendieron a seguirlo bajo las nuevas fórmulas y no bajo el tradicionalismo.
Si lo que parece estar vigente hoy en día, habrá que ver si cuánto tiempo se podrá mantener en boga y qué tanto impacto tendrá en los años por venir. Y es que en los estadios se empezará a extrañar a los que conocieron al producto cuando este no estaba acaparado por la secta que insisten en convencen que la sabermetría es el santo Grial.
Amén-