RINCON BEISBOLERO
Por: José Carlos Campos
14 de Noviembre de 2024- La noticia de la semana pasada lo fue el que los Sultanes de Monterrey (LMP) al parecer le dieron las gracias a Vinicio Castilla en su cargo de manager, quedando en el aire si esto fue un cese o decisión enteramente a cargo de Castilla, ergo, una renuncia. Las aparentes razones saltan a la vista luego de ver cómo es que los Sultanes en la primera vuelta, andan arrastrando la cobija.
Y el tema ha servido para que algunos traigan a valor presente ese presunto axioma beisbolero de que “los grandes jugadores nunca han sido buenos managers”.
En México, por ejemplo, se cita el caso de Héctor Espino, quien alguna vez fue nombrado manager de los Potros de Tijuana y no completó la temporada. Gran jugador pero manager sin éxito.
Podríamos citar en su caso que Espino no parecía tener el talante para dirigir equipos, su carácter anticipaba relaciones distantes con sus jugadores ya que el chihuahense era parco, de gestos generalmente adustos, callado casi por costumbre. Jesús Sommers, alguna vez su compañero de cuarto, nos dijo alguna vez que con Espino casi se tenía que comunicar con señas. Pecaba de serio.
Por el contrario, Castilla es más abierto, muy comunicativo sin ser locuaz y le sabe bien al juego. Ha tenido al menos dos experiencias en invierno (Naranjeros y Sultanes) y lo cierto es que no le ha ido bien. Pero no vemos en esto una sentencia, es parte del aprendizaje.
Será que el destino de Castiilla está fuera de México, su chamba con los Rockies es más cierta,
ANTECEDENTES- El axioma antes citado se aplicaba en lo general tomando como referencia a Ted Williams, el inmortal bateador de Grandes Ligas quien luego de retirarse de la pelota apareció como manager a finales de la década de los Sesenta del siglo XX con los Senadores de Washington.
Williams apenas tuvo un año ganador, en 1969, cuando su equipo ganó 86 juegos a cambio de 76 derrotas, luego llegaron los descalabros. En 1970 y 1971 aparecieron las vacas flacas (record de 70-92 y 63-96 para entonces aparecer con los Rangers de Texas con quienes le fue bastante mal, 54 ganados a cambio de 100 derrotas.
Pero ha habido muchas excepciones a esta presunta regla, casos como el de “Paquín” Estrada y su yerno Roberto Vizcarra aplican más que bien. Estrada con una trayectoria que lo impone tal vez como el mejor manager de la historia de la pelota mexicana y Vizcarra colgándose medallas tanto en verano como en invierno.
Y ya ubicados en el presente tendríamos que citar a Benjamín Gil, quien como pelotero se codeó con grandes estelares y como manager en México ha tenido una carrera que por decir lo menos, ha sido brillante. Aquí el axioma no aplica para nada.
Y volviendo a Castilla,, una pregunta más: ¿acaso los Sultanes, la directiva, le armaron un equipo medianamente competitivo? Ahí queda la cuestión.
MARCA- Ante el descuido y omisión que priva entre ciertos clubes por los registros históricos, es necesario acudiré a registros que presuntamente no son “oficiales” pero al menos son verídicos. Joey Meneses conectó su jonrón 50 con los Tomateros de Culiacán y surgió la pregunta: ¿aparece ya entre los máximos toleteros en la historia del club?
La lista actualizada es la siguiente: Nelson Barrea 121, Jorge “Chato” Vazquez 92, Kit Pellow 67, Ray Torres 64, Guillermo Velázquez 59, Lorenzo Bundy y Meneses con 50.
El pelotero culichi se convirtió así en el séptimo bateador que acumula 50 o más bambinazos vestido de guinda superando así a Saúl Mendoza quien se fue del equipo con 49.
Esto sirva para bajarle de tono a la estridencia sin evidencia. La ausencia de rigor en la investigación suele producir estos efectos.