RINCON BEISBOLERO
Por: José Carlos Campos
30 de Mayo de 2025- Decíamos hace unos días, aunque sonemos a disco reyado, que la transparencia es algo que a la liga (antes) Mexicana de Beisbol no le nace, que pareciera que la opacidad está remarcada en su ADN. Y en específico no referimos a la paulatina exhumación que se hizo de los controles antidopaje, curiosamente al mismo tiempo que las Grandes Ligas la desafilió.
Pero tal parece que esto del uso de sustancias prohibidas se ha llevado al tema de la entrega de datos sobre asistencias a los estadios, cifras que al verlas dan la impresión de que han sido “infladas” con esteroides para que así los golpes propagandísticos resulten de mayor impacto, particularmente sea para potenciales patrocinadores
En esta visión que se opera de manera frecuente se cuenta con la complicidad de los clubes, por supuesto, sin resquemor alguno del saber que la televisión, por supuesto, deja ver el tamaño de la falta de veracidad y del tamaño del disimulo (o falsedad) de los datos que se dignan dar a conocer y obviamente, a festinar por todo lo alto.
Lee uno las cifras y luego-luego la duda “pero si en la TV los estadios no muestran esos entradones que se presumen!. ¿Qué es lo que pasa?
FUENTES– Tenemos el gusto de contar entre algunas de nuestras amistades a no pocos personajes que se desempeñan como anotadores oficiales de algunos clubes, tanto de verano como de invierno. Lo común es que nos cuenten como anécdota que Fulano pelotero se enojó porque les “robó” un presunto hit al que marcó como error o cargar un imparable a un pitcher que lanzaba sin hit.
Como si fuera poco este tipo de situaciones, tienen que lidiar con directivos que se suman al reclamo del pelotero y hasta amenazan al anotador con que lo van a “botar” en caso de ponerse rebelde. Y esto ha sido desde hace muchos años
En los años 40, en el parque “Delta” de la ciudad de México, en un juego contra los Azules de Veracruz que eran de Jorge Pasquel, un bateador del contrincante Nuevo Laredo conectó una rola que se fue de hit. El anotador era Fernando Manuel Campos, “Fray Kempis”, quien no dudó en levantar el cartoncillo (no había pizarra eléctrica en ese entonces) informando que se anotaba como imparable.
En cuestión de segundos se apareció en el palco del anotador el mismísimo Pasquel quien apenas preguntó “¿a poco ese era hit, Fraile?” suficiente para que se inmediato Campos sacara el cartoncillo de error y borrar así la marcación anterior.
Así ha sido desde hace años.
ENTRADAS– Ya hace rato que las asistencias se “calculaban” a ojo de buen cubero por los anotadores, cifras que generalmente se redondeaban y esto era supervisado por los mismo clubes, cuyos directivos daban el visto bueno a lo que se anunciaría.
Devino algo que podemos llamar modernidad y ahora se supone que el criterio más socorrido es atender el factor “boleto vendido”, incluyendo en estos los abonos vendidos de antemano cuyos tenedores, asistan o no al parque de pelota, se registran como asistentes. Un recurso que se ha hecho más que socorrido, aunque la TV muestre “otros datos”.
La gráfica que aquí se muestra corresponde a hace unos tres días y abre mucho material para el comentario, siendo lo menos raro de todo el crecimiento en la ciudad de México (Diablos), la captación con estadio renovado en Méxida (Leones), llamando la atención el crecimiento que se reporta en Campeche (Piratas) con respecto a 2024 en 617 aficionados) o el decrecimiento en Oaxaca (Guerreros) con menos 2 fanáticos promedio con respecto al año anterior.
Lo peor es que hablamos de que no se trata de lo que el anotador percibe, sino de que es lo que le aprueban que diga.. total, es su palabra contra la de la TV.
TABLA MoSTRADA: Creada, diseñada y formulada ENTERAMENTE por Axel Mora @axelmora93