El Rincón Beisbolero

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RINCON BEISBOLERO

Por: José Carlos Campos

 

19 de Febrero de 2024- Nunca hay dicha completa, dice el dicho, y parece que a la LMB le cayó este año de sorpresa, diremos. Recién se anunciaba con bombo y platillo la concreción de su expansión a 19 equipos con la llegada de Querétaro y Chihuahua cuando por motivos “de causa mayor” se entera uno de que Durango sale de la competencia.

 

Problemas de orden mayúsculo hicieron que la franquicia de los Generales salga de la papeleta de participantes descomponiendo así el cuadro para que la anunciada expansión arranque de origen manchada en algo. Se tendrá que ajustar el calendario, jugarse el rol con número impar de equipos y forzando a que cada uno de los equipos tenga que descansar al menos una semana. Se descompuso el esquema, pues.

 

Eso sí, para evitar que los jugadores queden sin acción (y sin chamba) una temporada, se armará un draft para que el resto de los clubes se hagan de sus servicios. Ante eso, ni quien se oponga o establezca reparos: lo justo es lo justo.

 

Ojala y esto sea solamente por un año, que en 2025 ya haya sido arreglado esta rotura y se pueda jugar la temporada con los (muchos) veinte equipos confirmados.

 

Pero queda en el aire la pregunta, ¿es solamente la plaza de Durango la única plaza afectada? ¿No hay ninguna otra bajo amenaza de pedir permiso para darse de baja “temporalmente”?

 

DUDAS– La duda que se plantea es legítima, no carece de sustento. En México se vive un año electoral en este 2024, finaliza el sexenio en el que supuestamente el béisbol se convirtió en prioridad del gobierno y en el que se tomaron varias decisiones que supuestamente iban a impactar en el devenir de este deporte.

 

Algunas de ellas, por no decir que la mayoría, han resultado fallidas, al estilo del llamado PROBEIS (Oficina de la Presidencia para el Impulso al Beisbol) que apenas duró la víspera, de 2018 a 2022, instancia que creó bajo la equivocada visión de que sería la encargada de masificar este deporte en México e incluso, le puso meta numérica al número de peloteros que dicha oficina supuestamente iba a producir para enviar a USA.

 

Sirvió para entre otras cosas, meterle dinero a estadios y pagar favores vía expansiones forzadas a ligas profesionales. Esto es, se avivó el deseo por meterle dinero público al deporte profesional. Y en el fondo, dejar viva constancia de que al Presiden en turno mucho le apasiona la pelota. Todo fue, en resumen, darse el gusto por el gusto.

 

Termina el sexenio con resultados desafortunados en la materia y vale preguntarse: ¿se descobijará el escenario? ¿se irán con el Preciso clubes inflados artificialmente? Porque ya vimos que en Guadalajara las cosas no se dieron con los extintos Mariachis, a quien rescató el dinero privado para ahora ser Charros.

 

Y si se quedan, ¿de dónde saldrá el “oxígeno” para mantenerlos con vida?

 

VALORACIONES– En las redes sociales, casi sin pretenderlo, el colega y amigo Emanuel Rustrián reabrió un tópico sobre lo que hemos sido insistentes: elegir para el Salón de la Fama a umpires en una de las tareas más inciertas e improbables que se tenga.

 

Partiendo del hecho de que los integrantes del comité elector son miembros de la presa y que de este grupo a muy pocos, los menos, les viene bien eso de llamarlos “expertos”, abriendo la gran duda de someter a consideración de la masa votante el decidir si un umpire merece o no la inmortalidad.

 

¿Qué méritos deben considerarse? Si a diferencia del pelotero, no hay métricas, estadísticas o cifras que revelen si era “bueno”, “regular” o “malo”, si reconocemos que la mayoría del votante no capta al 100 por ciento en qué consiste la técnica del umpireo y si acaso, se basa en actitud o lo que cada quien considere “disciplina”.

 

Nosotros insistimos en que debiera existir un comité exprofeso, integrado por expeloteros y exdirectivos, que voten en esta materia, que definan criterios y ayuden a evitar tanto exageraciones como visiones reduccionistas y sobre todo, que ayuden a realmente hacer justicia.

 

Porque por ahora, serán votaciones por mera popularidad.


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